domingo, 23 de noviembre de 2008

"CORAZÓN PARTÍO" por Jesús Lens

Queridos amigos y amigas de Las Verdes, tengo el corazón partío y acudo a esta nuestra casa virtual a haceros partícipes de mis cuitas y desvelos.

Como sabéis, desde que empecé a pensar y a actuar en Verde, tuve una apreciable progresión en esto del correr. Por supuesto, mis marcas son mediocres, pero menos que antes. Lo más importante, sin embargo, no son tanto los tiempos como las sensaciones. He aprendido a disfrutar corriendo a ritmos más elevados, a gozar de los entrenamientos, a apreciar unas buenas zapatillas, a descubrir nuevas rutas, a competir y, sobre todo, he disfrutado mucho compartiendo largas tiradas junto a este grupo de aguerridos y nobles pateadores del asfalto.




Pero.

Como siempre, cuando uno empieza con un párrafo laudatorio como el anterior, viene un pero. Y mi pero tiene forma de balón. De balón de baloncesto. Aunque lo intento dejar, aunque trato de disminuir mis dosis de básket, no lo consigo. Como en la célebre fábula del escorpión y la rana, mi naturaleza me lleva, muy al contrario, a implicarme más y más, de nuevo, en el mundo de la canasta.

Y es paradójico: por el hecho de haberme quitado ocho o diez kilos de peso desde que pienso en Verde, mis prestaciones baloncestísticas han subido bastantes enteros. Estoy en buena forma, corro más y mejor los contrataques, salto más alto, cojo más rebotes...

Y en el pecado llevo la penitencia. Cuánto más y mejor juegas, cuánto más ímpetu le pones a tus evoluciones sobre la cancha, más sufre el cuerpo. Sobre todo, cuando juegas partidos oficiales y no sólo pachangas.

El sábado 15 debutamos en el Torneo del Patronato Municipal de Deportes de Granada, contra los cachorros de los Maristas. Les ganamos por 23 puntos sobre una cancha de cemento. Nos salió un partido muy bueno, pero cuando estaba en casa y me duché, fui consciente de los efectos colaterales del partido: rodillas cascadas, un fuerte golpe en un muslo y la espalda destrozada.

Esa noche, en el Isabel La Católica, escuchando a la banda que homenajeaba a Dizzie Gillespie, me retorcía sobre el asiento. Y al día siguiente, cuando salí a correr, no podía con mi alma. Sin que la respiración se alterase un ápice, las piernas se negaban a acelerar. Trece infames kilómetros a un ritmo infamemente cochinero hicieron que se me encendieran las alarmas.

Lo mismo me pasó el miércoles siguiente. Antes de echar mi partido de baloncesto, salí a hacer unas series de 400 metros. No podía. Me sentía lento y pesado. Y si hace quince días me salieron ocho series en el entorno del 1.30, en esta ocasión no conseguía bajar del 1.40. Y lo que es peor, cuando me fui a la cama esa noche, cansado como casi nunca, ni siquiera era capaz de conciliar el sueño, padeciendo los estragos de mil dolores pequeños y alguno más grandecillo.

Por eso, cada vez que mis zapatillas de atletismo, mis recién adquiridas Beast, las Bestias, ven que las dejo en el zapatero y me calzo las Nike de caña alta; gimen y sufren. Porque saben que estamos yendo hacia atrás, como los cangrejos.

Muchos de Las Verdes combináis deportes. Bicicleta, fútbol... ¿cómo lo lleváis? ¿Cómo conseguís hacerlos compatibles? ¿Somos corredores o, más genéricamente, somos deportistas? ¿Debo preocuparme, desistir? ¿Qué pasa con el reto de la maratón de Sevilla?

Cuando escribo estas líneas, sólo de pensar que en unas horas he de salir a correr un rato, hace que se me pongan los pelos de punta, sabiendo que voy a sufrir como un perro. Además, ahora me marcho a Málaga, una semana, a jugar al baloncesto durante seis días consecutivos. Y ello me obliga a terminar con una reflexión, en forma de bolero:

“Que yo no puedo comprender
Como se pueden querer
Dos deportes a la vez...
Y no estar loco.”

Jesús Lens Espinosa de los Monteros.
http://pateando-el-mundo.blogspot.com/

29 comentarios:

José Antonio Flores Vera dijo...

Se pueden querer, claro que sí. Uno te tiene atrapado desde hace mucho tiempo y forma parte de tu historia personal y otro ha formado parte de esa historia y ambos ya van de la mano. Por ejemplo, yo jugué al fútbol, como sabes, de portero. Y sé que salvo catástrofe, no volveré a hacerlo, pero la portería me sigue llamando la atención siempre y es lo primero que observo cuando veo un partido de fútbol. Eso está ahí para siempre porque formó parte de mi historia personal muchos años. ¿ Podría ser esa la explicación ? Tal vez.....
Una reflexión muy acertada, Alter.

Anónimo dijo...

Mi política entre bici, correr y sobre todo nadar, es tomarmelo todo con mucha filosofía, relajadamente, sin agobios y sin presiones, porque si al final mi afición se convierte en mi excesiva obsesión al final se que acabaré haciendo tumbing todos los días de mi vida. Así por ejemplo, llevo sin nadar 2 meses... no podía, era ver la pisicina y "lloraba", así que la solución es descansar de piscina hasta encontrar otra vez mi motivación. Además hay que cuidar el cuerpo y en mi caso la rodilla, que hay que seguir haciendo deporte muchos años.
Además creo que la solución más eficaz y rápida, sería que planificaras bien la temporada entre los dos deportes y que fueras realista en el esfuerzo a que sometes a tu cuerpo.
Saludos de Aleandro.

Mario dijo...

Jesús dificil esa poligamia deportiva, pero si corres mejor al contrataque, reboteas mejor, se llevaran bien y no se crean celos

Onio dijo...

Como siempre magnífico Jesus.
La mayoría de nosostros somos corredores entendiendo como tal aquel que disfruta corriendo, que quiere hacer mejores marcas, que se cuida para ello, etc...(mas referencias en la charla "Los mundos del corredor de fondo") pero también pienso que ante todo somos gente que ama el deporte y que ha cambiado la comodidad del sofá por unas zapatillas, por un balón (el que sea), por una bicicleta, por una piscina,... y así hasta donde quieras.
De lo que se trata es de disfrutar y de ser feliz haciendo aquello que nos gusta y si amas tanto al basket como al correr seguro que podrás encontrar el equilibrio entre uno y otro.
Por cierto los dientes largos tengo de leer el entreno que os pegasteis ayer y yo mientras con el pie metido en hielo, ¡que injusticia!...jejeje. Gracias por los consejos.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Jesús, te comprendo perfectamente. Hace 3 años empecé a correr pero lo que más me motivaba era el squash. Con el tiempo empecé a entusiasmarme más con el atletismo y notaba que el squash me dejaba las piernas contracturadas y pesadas para competir. Terminé por dejar el squash, eso sí, lo cambié por padel, mucho más compatible.

Mi consejo es que disfrutes haciendo deporte. Sigue corriendo que ya has visto todo lo que te aporta, pero pon en perspectiva tus avances en atletismo si estás con otro deporte.

La ventaja de practicar 2 deportes es que cuando estás más desmotivado en uno te entusiasmas más con el otro.

Un saludo!

Abel dijo...

Sin lugar a dudas Jesús, somos poli-gamos, o sea que practicamos varios deportes (games), al menos la mayoría de nosotros.
Yo siempre me recuerdo practicando deporte, y muchos son los que han jalonado mi vida. En este momento, disfruto enormemente corriendo, pero tambien me llama la bici de montaña, lo cual compagino, cuando el horario lo permite, y como bien dice Victor, se pueden compensar uno y otro cuando los ánimos no están en la cresta de la ola en alguno de ellos.
Ánimos con ese basket, y tú ya sabes lo agresivo, a nivel articular, que es, de modo que prudencia, que ya no somos niños...jejeje
Saludos!!

Paco dijo...

Jesús, la verdad es que cuanto mejor forma tengas corriendo mejor te encontrarás en el deporte colectivo, pero también con mayor riesgo de lesiones y molestias. Correr es una actividad cíclica y constante y los cambios propios del deporte de balón...por ahí leí un artículo que decía algo de que un ferrari no puede ir por cualquier carretera, solo está preparado para el circuito...ahi te dejo el simil. Lo mejor, intentar combinarlo porqu e no somos profesionales de nada no?saludos

Jesús Lens dijo...

Paco, esa es la clave. Cuanto mejor estás de forma, más fuerte te sientes en los deportes colectivos, más te esfuerzas, más te entregas... y más te desgastas. Y más riesgos de lesiones sufres.

Me gustaría ser capaz de tener mesura, pero no puedo. No sé jugar a medio gas. No me van las medias tintas. Y por eso acabo los partidos no sólo cansado, sino maltratado.

Y así, luego, no hay quién corra.

Pero claro, pensar en volver hacia atrás en las carreras, con las satisfacciones que me han dado este año, pues también me cabrea.

Mi plan es forzar con el básket hasta Navidad, pero sin dejar de correr. Luego perderme 15 días por esos mundos de Dios (creo que serán de Alá) y, a la vuelta, sólo pensar en Verde, con las miras puestas en Sevilla.

¿Es razonable? ¿Seré capaz?

Anónimo dijo...

Jesús, para tu primer maratón lo que tienes que hacer es mejorar tu fondo, olvídate más de las series pero incrementa el kilometraje. Desde enero te da tiempo a 2 ó 3 tiradas largas. Con la voluntad que tú tienes seguro que serás capaz.

Un saludo

Antonio dijo...

Yo al contrario que todos voy a emitir una opinión disidente. Tengo que matizar que no me gustan los deportes de equipo, y además soy malo en deportes que impliquen más de una dimensión. Así que mi opinión es bastante parcial y sesgada.

Decide, como dicen en el pueblo de Ana, tetas y sopas no caben en la boca. Si lo que quieres es hacer deoporte por tener buena salud, puedes correr, jugar al futbol, baloncesto, bici, estc, pero claro todo en su justa medida. Pero si quieres mejorar mucho en uno, tienes que dedicarte a ese y todas las demás actividades que realices han de ser complementarias al que más te interesa. Por ejemplo, si lo que quieres es mejorar corriendo y lograr nuevos retos, has de dedicarte a ese deporte, otra cosa es que busques actividades complementarias como nadar o la bicicleta, pero el baloncesto tal y como se despende de tus palabras no es tal, sino más bien contraproducente. Ahora si lo que quieres es jugar mejor al baloncesto, correr si parece una buena opción para mejorar, pero no como te lo planteas ahora mismo, con retos y marcas.

Decide, pero creo que tu cuerpo te está diciendo cual es la actividad que mejor le va, otra cosa es que tu mente prefiera las bondades del deporte en equipo, cosa muy comprensible.

Además el padrino quiere que subamos al conjuro, quiere que conquistemos esa loma. Ferrando quiere que el grupo asalte el MARASEVI. Eso es lo que corroe al padrino

Un abrazo

Mario dijo...

Antonio no todos pueden ser poligamos, pero sí llevas razon en que el baloncesto no es complementario del corer, si al contrario, y eso de los deportes colectivos, creo que el correr se plantea como alternativa muchas veces a no depender de nadie, sólo de la voluntad propia, para mantener un buen estado mental, es una actividad "liberal", en principio de poco contenido social, pero como mas de uno sabe por tu liberalidad has contribuido a su mejora y colectiva.

Jesús Lens dijo...

Padrino, aquí Ex-Tipo Duro 1... se le recibe alto y claro.

El Padrino ha puesto el dedo en la llaga. Una cosa es salir a correr para estar más o menos en forma y que el hacer ese deporte te permita mejorar en el baloncesto.

Otra es querer ser corredor.

Sencillamente, ser corredor y ser basketbolista, es contradictorio. O sea, puedo aprovechar el fondo de correr para mejorar las prestaciones en cancha de baloncesto, pero éste me machaca las articulaciones y la espalda.

Como dice Víctor, hay que renunciar.

Lo que pasa es que, cuando creía estar fuera del básket, las circusntancias, los amigos y el espíritu de pertenencia a un equipo me han vuelto a arrastrar.

En fin.

Padrino que aceptamos la misión del Conjuro e intentaremos poner una cabeza de playa en Carchuna. ¿Qué día es la prueba?

Sobre todo no obsesionanrnos. Pero claro, mañana jugamos contra Penedés y hoy no salí a correr para estrar frescos...

Una contradicción sobre dos patas es lo que soy.

Abel dijo...

Mi opinión es que, para aquellos, como yo, que no soy deportista profesional, y mis metas son sentirme bien física y mentalmente, a través del deporte, es completamente compatible cualquier tipo de deporte.
Las satisfaciones que me da el correr, son parecidas a las que me da el montar en bici de montaña, como en ocasiones me da el esquiar, o el remar en kayak.
Tambien me las dió el tenis, el futbol, el basket y el balonmano, el padel, el windsurf, la equitación, el snowboard y el esquí de fondo, el kite surf y el skate, el submarinismo o el treking.
Para mí, se trata, en último extremo, que soy un amante del deporte, sin considerarme por ello un deportista, que mi vida siempre ha tenido como hilo conductor el buscar las satisfaciones que la adrenalina y el agotamiento me han aportado. Por ello pienso que si tengo que elegir un deporte para quedarme con otro, me sentiría como una madre que tiene que renunciar a uno de sus hijos, y por tanto no me cabe en la cabeza.
Reinvindico que se disfrute del deporte, indididual o colectivo, intenso o moderado, con frio o con calor, en secano o acuático, pero DEPORTE al fin y al cabo.
Saludos exentos de polémica!!

Mario dijo...

abel lo tuyo es abuso, para la vejez habras dejado la petanca

Anónimo dijo...

Yo, monógamo. Pero como ya hay suficientes opiniones y consejos, me limitaré a expresar mi propia experiencia:
Parto de la idea que defiende Abel: deporte, sí o sí, sea del tipo que sea; ahora bien, yo estuve muchos años jugando al fútbol sala y corriendo. Los alternaba.

Con el tiempo, por razones de movilidad laboral, la continuidad en fútbol sala se hacía inviable, y al principio sentía nostalgia de mis pachangas y liguillas provinciales, mis punterazos, mis entradas y broncas barriobajeras.

Pero seguí corriendo; y descubriendo que es éste el deporte que me apasiona, que me aporta más positivismo, que más me motiva y me completa como persona. Así que lo tengo claro: ya no podría alternar dos deportes; no diría que no a una pachanga, a sabiendas de que después tendría cien mil pequeños dolores, pero de vez en cuando. Sólo de pensar que me impida correr ya me hace sentir escalofríos.
Correr. Sí. Siempre.

Jesús, a pesar de todo, comprendo la disyuntiva en la que te encuentras. Pero, honestamente, creo que pronto te dejarás de historias con pelota y sólo te centrarás en correr. Al tiempo, jeje.

saludos

Gregorio Toribio Álvarez dijo...

Jesús, a diferencia del amor, en los deportes está admitido "tener amantes". Así que, si disfrutas y no sufres lesiones, sigue siendo "un poco infiel". Saludos.

Anónimo dijo...

Compae Lens: Tu exito radica en ese crecimiento tan espectacular que has conseguido en tan poco tiempo.
Se deduce de tu excelente comentario, la pregunta de donde esta tu meta?.
Yo personalmente te puedo decir que con esa fuerza de voluntad que tienes, lo generoso que eres en el esfuerzo y sobre todo haber conseguido el habito de practicar deporte, tira palante, se egoista (con criterio) y fija objetivos razonables coño, que ya tenemos una edad.
Divierteté y disfruta con el baloncesto, con el correr y con lo que se ponga por delante.

Para eliminar los dolores, recuerda que han inventado el Thrombocid.

Te recuerdo que hay ojeadores de la Universidad de Georgetown pendientes de tu progresión, no me falles.

Recibe un fuerte abrazo de TU COMPAE.

José Antonio Flores Vera dijo...

Decía en mi primer comentario, que se pueden querer varios deportes, porque forman parte de nuestra historia personal. Ahora bien, comparto lo que muchos decís aquí sobre la dedicación a uno sólo.
Pensad que el poco tiempo del que disponemos hace inviable alternar varios deportes, además de que esa falta de tiempo y por tanto de entrenamiento podría hacernos más vulnerables a lesiones, y la mejora no llegaría en ninguno de los dos. Por tanto, insisto, cosa distinta es tenerle aprecio y buenos recuerdos a algún deporte que ha cubierto muchos años de nuestra vida e incluso, como dice Javi, alguna pachanga que otra, pero la dedicación vigente debería ser a uno sólo. Y en ese sentido, no encuentro nada como el correr. Menos agresivo que la mayoría y más satisfactorio; además, se puede practicar tanto individual como colectivamente ¿ alguién dá más ?

Onio dijo...

¡¡Coño Abel!! ¿a ti de pequeño no te llamarían Sport Billy por casualidad? Como dice Mario, deja aunque sea la petanca para la vejez, jejeje.

Anónimo dijo...

Carlos yo te entiendo perfectamente. Yo juego los miércoles al pádel desde hace 4 o 5 años con unos buenos amigos. Al fútbol los sábados desde hace lo menos 13 con otros más de lo mismo. La verdad es que las carreras me gustan y me emocionan pero no quiero renunciar a nada, y todo ello sin contar con los dos deportes que más me emocionan y que practico desde los 13 años, el windsurf y el surf. Como verás yo tengo el corazón 'partío' pero por muchos sitios.

Yo soy ante todo DEPORTISTA y como la vida son dos días y uno es fiesta, a disfrutar de todo lo que ésta te pueda ofrecer. Es mejor no agobiarse sobretodo porque lo que hacemos, lo hacemos para disfrutar, y no para atormentarnos.

No obstante, en cada momento de la vida es normal que el cuerpo te pida más de una cosa y menos de otra, escúchalo y hazle caso.

Un abrazo chato

Javi R.

PD: Al cuerpo también hay que darle mala vida, ya sé que se la das, como yo, pero lo digo por el resto. Aunque sea de vez en cuando.

Jesús Lens dijo...

Javi, Javis, cómo me conocéis... Hoy tengo un bocadillo en la pierna derecha. Ahora no podría correr. Pero mañana saldremos a calentar a las 8.30 y a las 9 nos dejaremos la piel en la cancha. A este ritmo, llegaré roto a Granada. Pero la satisfacción de ganar, de pelear, sufrir, chocar, los árbitros, los contrarios...

Hoy ganamos por 5 a los aguerridos chavales de Penedés. Y estamos tan exultantes como cansados. Y ha sido sólo el primer partido.

Cuando la semana que viene no pueda con mi alma, me arrepentiré, pero de momento... txatxi el baloncesto. Eso sí. En las carreras daré un bajonazo de órdago.

Mi pensamiento: que antes que las carreras, el basket huirá de mí. Entonces me centraré al 100% en correr. Espero. Y luego llegará el gimnasio, el spining y, por fin,,, ¡¡¡la petanca!!!

Pero hay que trabajar en el tema planteado por Abel: el ser deportista.

Anónimo dijo...

Bueno, si estás en momento dulce baloncestístico, ¡adelante!, que te veo exultante, jeje.

Por otro lado, otra transacción satisfactoria de los States: J. Antonio y servidor nos hemos hecho con sendos pares de Brooks Trance 7 a un precio de escándalo. El que la sigue la consigue. Ole!

José Antonio Flores Vera dijo...

les llamaremos Brooks Obama..

Anónimo dijo...

¡Además son oscurillas!

Mario dijo...

jose antonio mañana salida nocturna helada??? espero poder llevar nuevo calzado si puedo recogerlo. Concretamos mañana

Anónimo dijo...

Mario, tú tb has pescado al otro lado del charco? Qué son, unas Nimbus?

Mario dijo...

eso es javi, nimbus 10, soy fiel

José Antonio Flores Vera dijo...

Mario, te iba a llamar mañana. No podré, tengo un cumpleaños familiar y cambiaré a esa hora las zapas por hábitos menos sanos. Pero la interrupción sólo afectará a este miércoles. Esas subidas heladas a la Alhambra son sagradas.

Anónimo dijo...

Practicar deportes con distintas aplicaciones musculares requiere el obligado respeto de unos tiempos de recuperacion ya que en si mismo correr no es imcompatible con otras practicas.
El problema que tenemos los que amamos correr es que muchas veces nos obsesionamos de tal manera que nos olvidamos de que sin un buen descanso no hay disfrute ni progresion.